Daniel Ortega y Felipe Calderón
Foto: alfredo guerrero
El presidente de México –país al que históricamente la clase política latinoamericana consideraba el “hermano mayor” de Centroamérica y El Caribe– tuvo que conformarse ahora con presenciar la investidura de Ortega desde esa posición, flanqueado de los mandatarios de la República Árabe Saharaui, Mohamed Abdelaziz, y de la República Dominicana, Leonel Fernández, justo en el extremo opuesto donde su homólogo nicaragüense pronunció su discurso ante 5 mil personas que lo ovacionaban, según informó el jueves 11 la prensa local.
Calderón asistió a la toma de posesión de Daniel Ortega con la intención de retomar el liderazgo regional que México perdió durante el foxismo. Pero su ilusión se hizo triza.: No logró atraer la atención de los mandatarios presentes ni la prensa, destaca el reportaje que publica Proceso este domingo 14 de enero.
(enlace a nota de proceso)