Por Víctor Hernández
El miedo a 12 palabras
Tanto medios de comunicación como panistas, priistas y chuchos, mintieron y tergiversaron sobre la movilización de ayer del movimiento en defensa del petróleo. Lo presentaron como si se tratara de un capricho de AMLO para echar abajo la reforma energética. La realidad es que lo que se buscaba con la movilización no era echarla abajo. Al contrario, ya la había calificado AMLO como un triunfo puesto que eliminaba la mayoría de los elementos privatizadores de la propuesta original de Felipe Calderón.
Lo que se buscaba en realidad era principalmente que se añadieran 12 palabras a la reforma energética: “No se suscribirán contratos de exploración que contemplen el otorgamiento de bloque o áreas exclusivas”. Estas 12 palabras se agregarían al artículo 60 de la Ley Orgánica de Petróleos Mexicanos como fracción séptima.
Y ya. Era algo así de sencillo. Esto garantizaría que empresas privadas, principalmente extranjeras, no pudieran adueñarse de kilometros enteros del territorio nacional para explotarlos con el aval de Pemex, y protegería la soberanía y al patrimonio nacional.
Pues a esas 12 palabras se opusieron el PRI y el PAN. Tanto en comisiones del Senado como en el pleno. Y con la ayuda de los chuchos se apresuraron a aprobar una reforma petrolera sin estas 12 palabras. ¿Por qué? ¿No que buscaban que no hubiera privatización? ¿Mintieron entonces PRI, PAN y chuchos?
Aún falta que la cámara de diputados apruebe o no la reforma energética. Los diputados del FAP tienen ahora la responsabilidad de añadir estas 12 palabras a la iniciativa. Y a los que apoyamos a este movimento lo que nos corresponde es informar a todo el mundo sobre lo que representan los contratos en bloque para que el rechazo a estos contratos sirva de respaldo a los diputados.