(por Víctor Hdz)
Practicamente todos los diarios señalan el día de hoy que hubo una "negociación" por parte del PRD para que se diera el grito de los libres a las 9:45 pm y luego felipito diera su grito de los acarreados a las 11:00 pm. El Milenio lo publica así:
Encabeza la senadora ceremonia de los libres
Opta Ibarra por ceder la plaza
Lopezobradoristas despliegan enorme manta de repudio bajo el balcón central.
“¡Qué viva nuestra presidencia legítima y muera el mal gobierno!”, fueron las frases que enmarcaron la ceremonia del llamado Grito de los libres, encabezada por Rosario Ibarra en el Zócalo capitalino.
Quince minutos antes de las 10 de la noche, los integrantes de la Convención Nacional Democrática encabezaron la ceremonia alterna, en la que innovaron el formato tradicional.
Además de recordar a “los héroes que nos dieron patria”, hicieron mención de los presos y desaparecidos políticos.
Una vez concluida la interpretación completa del Himno Nacional, en su ya común votación a mano alzada los integrantes eligieron abandonar el Zócalo capitalino, el objetivo, hacer el vacío a la ceremonia presidencial.
El Zócalo estuvo reñido este sábado por los aparatos de sonido de la Convención Nacional Democrática y los organizadores de la ceremonia oficial, luego de que al filo del mediodía el PRD decidió levantar las carpas para iniciar los festejos.
Los templetes y las grúas que cargaban las ostentosas bocinas compitieron por la atención de los concurrentes a las tres ceremonias conmemorativas del inicio de la gesta de 1810.
Por un lado, el acto del GDF, por otro el Grito de la Convención Nacional Democrática y por último el de la Presidencia.
La polarización se hizo evidente hasta en la ubicación de templetes y grúas que sostenían las bocinas. Se colocaron de frente, cada una en un extremo de la plancha del Zócalo.
Aunque el equipo de sonido contratado por la Convención Nacional Democrática abarcaba las tres cuartas partes de la explanada y dejaba un menor espacio a las grúas de la Presidencia de la República, la potencia de las ocho torres que sostenían las bocinas era tan intensa que opacaba a la competencia.
Si bien la CND se comprometió a levantar su campamento al filo del mediodía, no lo hizo sino hasta después de las seis y media de la tarde.
Los miembros de la resistencia civil permanecieron parados de frente a Palacio Nacional para esperar la ceremonia del Grito de Independencia.
Cerca de las siete treinta de la noche, cuatro horas antes de la ceremonia de Felipe Calderón, bajo el balcón central de Palacio Nacional los integrantes de la CND sacaron una monumental lona de dos metros de ancho y casi del largo de la explanada del zócalo.
En la manta, que estuvo posteriormente a la vista del presidente Felipe Calderón durante su Grito se leía: “Andrés Manuel López Obrador, Presidente Legítimo de México”.
Luego gritaron consignas, que el equipo de sonido de la Presidencia de manera infructuosa trató de opacar.
Sonideros
Simpatizantes de Andrés Manuel López Obrador realizaron un acto paralelo a la ceremonia oficial detrás del extenso vallado colocado por la policía para proteger el Palacio Nacional, en medio de una guerra de sonidos para acallar al respectivo rival político.
La Presidencia instaló siete grúas gigantes con bocinas que transmitían música a todo volumen, mientras varios oradores de la izquierda trataban, con cuatro torres de bocinas, imponerse.
Presidencia organizó una verbena con El Recodo y K-Paz de la Sierra para atraer a los asistentes al acto oficial.
Han habido algunos comentarios de lectores que ven a esta decisión de retirarse del Zócalo como un error. Confieso que en un principio yo también lo vi como un error. Pero luego, con la cabeza fría, me puse a considerar lo siguiente:
1. Desde la madrugada quedó claro que fecal iba a rellenar la zona PELELE con ACARREADOS. Abandonar el Zócalo lo que implicaba era simple y sencillamente dejar al PELELE sólo con sus ACARREADOS. Lo cual quiere decir que el grito del PELELE fue un grito 100% ARTIFICIAL. NO fue un grito del pueblo. Fue un grito de militares y acarreados panistas.
2. NUNCA se había tenido que acarrear gente para dar el grito de independencia. Esta vez, el PAN tuvo que llevar camiones y camiones de acarreados que dejaron estacionados en el centro histórico y bellas artes. Un lector tomó una foto con su celular de una hilera de camiones de acarreados panistas en el centro histórico:
Precisamente por ESO es que la resistencia GANÓ esta batalla. Por que a los renegados no los acarreó nadie. Fueron al Zócalo por su propia decisión y se enfrentaron desde la madrugada a las provocaciones del EMP, PFP y ejército. En cambio, los acarreados panistas deben de haberse zurrado en los calzones al verse ante tanto repudio al PELELE y todo lo que el CEROTE CON PATAS representa.
3. Fue tan OBVIO el repudio al PELELE en el Zócalo, y tan OBVIO el acarreo, que cuando uno de los hijos de Martarita Zavala (vayan ustedes a saber si también sean del mojón) se quiso asomar a ver al Zócalo, ella lo trató de distraer para que mejor volteara a ver a los fuegos artificiales. Ya me imagino la pregunta más tarde "mamá, ¿por que dice la gente que el presidente es López Obrador?" seguida de un silencio incómodo.
4. La polarización del país fue obvia de principio a fin. El estado militar FASCISTA fue obvio de principio a fin. Y esto es algo que no se le va a olvidar a NADIE que haya estado al tanto de lo que ocurría en el Zócalo desde temprano. Habrá quien diga "pero es que en la tele se vio tal y tal y lo que dice la tele es lo que cuenta." Pero yo RESPONDO: NO, lo que dice la tele NO es lo que cuenta. Y si eso es lo que vas a creer, entonces no tienes NADA que hacer en este movimiento. Por que nuestra labor como renegados es ROMPER EL CERCO INFORMATIVO. Somos NOSOTROS quienes tenemos que mostrarle a la gente la EVIDENCIA de lo que ocurrió para que se desegañen. Y en este blog y en RadioAMLO se presentaron TODAS las evidencias que muestran que lo que dice la tele es FALSO. Ahora le corresponde a los renegados difundir esta información a más gente. Por e-mail, mostrando impresiones de fotos, mostrando videos, etc. NO esperen de la tele nada bueno. Sean USTEDES quienes tomen la iniciativa de romper el cerco informativo.
Vaya: no se ha mencionado en NINGÚN MEDIO ni media palabra del acarreo de militares. Pero las fotos y videos están en este blog. ¿Qué esperan para difundir esa información? ¿O pretenden que magicamente las cosas se hagan sin que ustedes tengan que mover un dedo? Valientes renegados me salieron los que piensan así entonces.
3. Un grito de independencia ARTIFICIAL es igual a una presidencia ARTIFICIAL. Por mucho que le quieran lamer las patas a felipito en el ReforPAN o en el Universal. Felipito tuvo que PAGAR para acarrear gente para que le aplaudiera y eso lo que muestra es la enorme DEBILIDAD del ESPURIO, ya que ahora ha demostrado ser un presidente ILEGÍTIMO y SIN PUEBLO que lo apoye.
4. Convertir al grito de independencia en una fiesta privada VIP habla volúmenes de lo rápido que se está hundiendo el mojón en su propia mierda. Quiere decir que NADIE le da el avión. Que tiene que comprar aplausos, y que carece de la autoridad moral--o de cualquier otra índole--para decirse presidente.
5. Esto que pasó ayer generó mucho descontento en el ejército. Tuvimos reportes de cientos de soldados que se negaron a ir al Zócalo y que fueron arrestados por negarse. OJO por que esto es muy importante: si los soldados se negaron a participar en el acarreo de felipillo para ser extras de su obra de teatro, quiere decir que con más razón se negarían a ser guaruras del PELELE en caso de que hubiera un estallido social. Felipito el USURPADOR está atizando el descontento del ejército a niveles francamente peligrosos. Si en una de esas el ejército decide darle la espalda a felipito, y decide apoyarse en el poder legislativo para que se de un juicio político al enano por traición a la patria, el pelele está perdido. NO habrá quien lo quiera proteger. El costo de estos teatritos del enano le está resultando mucho más alto de lo que se imaginaba.
Y hay más que decir al respecto. Por ejemplo: el oportunista Froylán Yescas, quien se puso a gritar a lo güey en el templete del Zócalo un disque discurso que en realidad era un fusil de un discurso del peje, solamente logró a medias su objetivo de usar al grito de los libres para avanzar sus ambiciones políticas. Se mostró carente de compostura para hablar ante las masas, se vio MAL fusilándose el discurso del peje, y mostró no tener personalidad propia para dirigirse a la gente. Y claro: se le cebó su pretensión de poder pararse el cuello alegando que pudo llevar al peje a dar el grito.
En fin. Me parece que viendo las cosas en perspectiva, ayer fue otro triunfo más para los renegados, y una muestra más de que el PELELE no tiene el apoyo del pueblo. Tan fue así que tuvo que disfrazar al ejército de pueblo y acarrear panistas bajo amenaza de quitarles apoyos económicos para que hubiera quien le hiciera caso.
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Seguimos con otra crónica del grito en el Zócalo, esta del Milenio, en donde casi casi lo presentan como si hubiera sido un empante en pejistas y fecalistas. Nadamás que hay un detalle: cuando los fecalistas acarreados llegaron al Zócalo, los pejistas ya casi se habían terminado de ir. Es decir, los acarreados panistas no pudieron opacar a una fracción de los pejistas que fueron al Zócalo:
Crónica
Un zócalo entre fuego cruzado
Anoche pejistas y calderonistas sostuvieron durante toda la tarde una batalla por el control de la plaza. Fue el Grito de un México dividido.
Y este 15 de septiembre los políticos trasladaron sus disputas a la Plaza de la Constitución, donde tuvo lugar una guerra por el Grito, una conflagración por controlar los sonidos y los espacios, una escaramuza metro a metro entre pejistas y presidencialistas que tuvo distintos frentes de batalla…
La seguridad. El Estado Mayor Presidencial (EMP) ocupó una cuarta parte de la plaza, a partir de Palacio Nacional. Cientos de soldados vestidos de civil hicieron suyos alrededor de 100 metros del lugar, desde las puertas de Palacio hacia el centro de la plaza. Nunca la gente que acude año tras año a festejar estuvo tan lejos de la fachada del edificio virreinal.
Adicionalmente, el EMP colocó arcos detectores de metales en todos los accesos a la plaza, y encendió 20 poderosos reflectores en el techo de Palacio Nacional: tal como ocurre en películas gringas, donde las escenas transcurren en cárceles, los reflectores recorrían una y otra vez los edificios de la plaza, sus ventanas y azoteas, al igual que a la muchedumbre, como si se tratara de los bodegones y el patio de una inmensa prisión, la prisión del Zócalo, del Zócalo aprisionado por las luchas de los políticos.
El sonido. La Presidencia puso un enorme escenario a un costado de Palacio Nacional. Ahí, bajo un gran escudo nacional, varios bandas musicales tocaban. Del otro lado de la plaza el gobierno capitalino hizo lo propio en otros dos escenarios bajo el escudo juarista (elaborado con foquitos) que usa AMLO. Si los pejistas pusieron cuatro gigantescas grúas con grandes bocinas de sonido, los presidencialistas colocaron siete. El resultado, una ensordecedora refriega de sonido donde los ritmos musicales chocaban en un ambiente de ruido incesante. Una batalla de locura auditiva producto del machismo político de unos y otros. La escena también era fílmica: como en las películas de Vietnam, cuando los gringos ponían música perturbadora para enloquecer a sus contrincantes.
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Rosario Ibarra de Piedra daba “el Grito de los libres”. Gritaba “vivas” al presidente legítimo y “mueras” al “espurio”. Pero la sorpresa ocurrió unos instantes después, cuando Jesusa Rodríguez tomó el micrófono y preguntó: “¿Nos vamos o nos quedamos?” La enorme mayoría votó a mano alzada por la partida. Y así ocurrió. En media hora la plaza, completamente llena a esa hora en todos sus espacios no ocupados por templetes o por el EMP, se vació a la mitad. Sin embargo, las familias que tradicionalmente acuden al lugar y que venían arribando al zócalo, llenaron el vacío.
A las 11 salía Felipe Calderón al balcón presidencial y tocaba la campana de Dolores. Los coros de “¡Obrador-Obrador!” batallaban con los de “¡Calderón-Calderón!”, los silbidos y mentadas de madre competían con los aplausos. Los miembros del EMP levantaban unas largas banderas tricolores sin escudos para impedir que quienes estuvieran en las primeras filas junto a las vallas pudieran visualizar al Presidente y que éste viera las pancartas de repudio de los pejistas que quedaban en el lugar: “Ese pinche pelón de lentes no es el Presidente”. Calderón daba un grito sobrio. Permanecía en el balcón no más de dos minutos. Luego volvería para ver los fuegos artificiales. Y se marcharía de nuevo.
Concluía la machista guerra política que durante horas mantuvieron los pejistas y los presidencialistas para controlar la Plaza de la Constitución.
Y al final, ganaron los PEJISTAS. Que no se les olvide.
